Una obra de teatro que no solo destaca por la pulcra actuación de sus protagonistas, sino también por el mensaje de libertad que ofrece: Maquinal, dirigida por Josué Méndez.
Esta obra aborda la historia de la primera mujer ejecutada en la silla eléctrica en 1927, en Nueva York. La actriz Jely Reátegui destaca en el rol protagónico, sea por talento y despliegue físico.
“Josué me pidió que trabaje desde la incomodidad y la tensión y eso se manifiesta en el cuerpo y la voz. Durante el transcurso de la obra, la voz y el cuerpo van mutando por las diferentes situaciones por las que pasa Helen”, dice Jely, quien considera esta participación como un obsequio de la vida.
“Hace tiempo que no hacía teatro y volver con un papel como el de Helen, en este momento de mi vida, es algo de lo que estaré agradecida siempre”.

Helen solo pide vivir, busca la plenitud y por intentar encontrarla, fue sentenciada a la silla eléctrica. (¿Inevitables ecos de actualidad?).
Esta es una actuación consagratoria para Jely y el secreto de su logro no es otro que la ausencia del mismo:
“No doy nada por sentado. Hay que seguir entrenando, observando, aprendiendo y hacer lo posible por mantener el corazón humilde, la cabeza en las estrellas y los pies en la tierra”.
Aquí hay proyección.